Si de repente un día encuentras un bulto en la encía, sientes molestia y dolor, estamos ante un caso de asistencia al dentista sí o sí para ver cuáles son los problemas que están generando ese malestar, aunque seguramente se deba a una mala higiene bucodental. 

Es normal que además de sorprendernos por este tipo de aparición repentina, contemos con incertidumbre acerca de qué es y por qué ha salido. En ese caso, siempre es recomendable ir al dentista para que el profesional realice una exploración profesional. 

Tipos de bultos en las encías

Fibroma

Su apariencia es dura y redonda y suele salir por irritación en las encías, en los labios o en la lengua. El fibroma no suele doler, aunque si es posible que notes un poco de escozor. El motivo de su aparición no es una mala higiene bucal, es más bien un caso de malos hábitos al modernos el labio o los carrillos y su solución es sencilla. 

Si por el contrario se debe a la fricción producida por aparatos o prótesis dentales, el profesional ortodoncista deberá revisar el origen que ocasiona esa irritación.

Fístulas o abscesos

Si notas que sale un líquido blanquecino o pus, estaremos frente a un proceso infeccioso sobre el que hay que trabajar. Esto puede ocurrir por diferentes motivos: 

  1. Por caries: La acumulación de bacteria en la raíz del diente puede hacer que comiencen a aparecer bultos en el diente perjudicado. 
  2. Problemas en una endodoncia, al no haber logrado eliminar todas las bacterias. 
  3. Muelas del juicio que no son capaces de erupcionar: Si el bulto se identifica justo en la zona donde suelen salir las muelas del juicio, probablemente estemos ante la próxima salida de una muela de la sabiduría. Hay que recalcar que la erupción sin más de una muela del juicio no conlleva la supuración, a lo sumo una inflamación. Ahora bien, la infección se produce cuando la muela no es capaz de erupcionar y la encía que la rodea se queda suelta, pudiendo introducir alimentos en ella como si fuera un fondo de saco. En estos casos es cuando se produce la infección e incluso supuración, conocida como pericoronaritis.
  4. Absceso periodontal: Si eres un paciente con enfermedad periodontal, es común que suelan aparecer bultos en las encías y la solución pasa por raspado y alisado radicular. 
  5. Épulis gravídicos: se da en caso de pacientes embarazadas. 

Existe otro motivo por lo cual puedes tener un bulto en la encía y se trata de un tumor, pero éste no implica una fístula o absceso. Presenta un color rojizo y sangrante y lo recomendable es que acudas a tu clínica dental de confianza cuanto antes. Recalcar de nuevo que una muela de juicio que sale con normalidad no debería presentar fístulas o abscesos.

¿Cómo quitar el bulto en la encía?

Si lo que tienes finalmente es un fibroma, se retirará el bulto y se realizará una limpieza bucal para asegurarnos de una higiene completa. 

En el caso de las fístulas, hay diferentes soluciones a abordar según el caso del paciente: 

  • Realizar una pequeña abertura y drenar el pus existente. 
  • Tratar el conducto, es decir, si se puede salvar el diente, se llevará a cabo una perforación del diente para eliminar el tejido central o pulpa y drenar el absceso. No te preocupes, se procederá después a cerrar esa perforación. 
  • Si la pieza dental no tiene salvación, se procederá a la extracción y a la limpieza de la zona para evitar más infecciones. 

Recuerda que la mejor prevención es siempre una buena higiene oral, por lo que cepilla tus dientes 2-3 veces al día, utiliza seda dental y acompáñalo de colutorios.

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