Cuando un diente está en proceso de erupción o se encuentra parcialmente erupcionado, se puede producir una inflamación de la encía y tejidos blandos que rodean la corona del diente. Esto es lo que conocemos como pericoronaritis o pericoronitis

Aunque en las personas jóvenes (20-30 años) es más común en los terceros molares, también conocidos como muelas del juicio, en los niños suele darse cuando está erupcionando el primer molar, que suele darse entre los 6-7 años. Es posible que esto ocurra porque no hay suficiente espacio o que erupcionan de una forma incorrecta. Esta condición puede ser muy dolorosa y no debe dejarse pasar. 

Existen dos tipos de pericoronitis, la crónica, que se presenta en forma de inflamación leve y persistente de la zona; y la aguda, que es una inflamación que puede presentar fiebre e incluso dolor de garganta, afectando también a los ganglios linfáticos. 

En este artículo, explicaremos las causas, síntomas y tratamientos de la pericoronaritis.

Cuáles son las causas de la pericoronaritis

La acumulación de bacterias debajo de la encía que rodea la corona del diente hace que se produzca la pericoronaritis. Como hemos comentado antes, una muela retenida o impactada (parcialmente erupcionada), dificulta mantener una buena higiene bucal. Se convierte en lugar ideal donde se acumulan las bacterias y los restos de alimentos. Además, la presión que ejerce el diente en la encía circundante también puede contribuir a la inflamación.

¿Qué síntomas puede experimentar el paciente con pericoronitis?

Los síntomas leves de la pericoronaritis incluyen:

  • Dolor, en un principio, en la zona del diente afectado, aunque puede dirigirse hacia el oído y la cabeza.
  • Inflamación alrededor del diente afectado. 
  • Sensación de ardor
  • Dificultad a la hora de masticar en el lado donde tenemos la inflamación
  • Dificultar a la hora de tragar
  • Enrojecimiento de la zona
  • Infección en la boca, que puede llegar a producir fiebre
  • Produce mal sabor en algunas ocasiones
  • Mal aliento o halitosis

Si se dejan pasar estos síntomas, es posible que el paciente experimente otros síntomas más graves, como puede ser la aparición del conocido “flemón”, inflamación de los ganglios o enfermedades periodontales como la gingivitis y periodontitis, de la que os hemos hablado en muchas otras ocasiones. 

¿Qué tratamientos se pueden aplicar?

Todo depende del grado de inflamación y de gravedad. Podemos distinguir 3 situaciones: 

  • Casos leves, donde recomendamos utilizar hilo dental para limpiar la zona afectada, así como el uso de colutorios bucales antibacterianos y/o analgésicos para que el paciente sienta algo de alivio referente al dolor.
  • Casos graves: es posible que sea necesario realizar una extracción dental para evitar una infección que pueda ocasionar otro problema mayor. Un caso grave, por ejemplo, sería cuando hubiera presencia de abscesos. Aquí sería importante tratar la infección con pauta antibiótica para que remita el problema, aunque es necesaria la exodoncia del diente causante de la pericoronaritis.  

En Isdent, tu clínica dental de Pedrera, ofrecemos tratamientos efectivos y de calidad para la pericoronaritis y otras afecciones dentales. Si experimentas síntomas de pericoronaritis, es importante buscar atención dental inmediata. Nuestro equipo de profesionales altamente capacitados está comprometido en proporcionar el mejor servicio a nuestros pacientes.

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